Cambio radical en el Espíritu.
- Monjes Trapenses
- 30 abr 2019
- 2 Min. de lectura

Evangelio según San Juan 3, 7-15.
No te extrañes que te haya dicho: “Ustedes tienen que renacer de lo alto”. El viento sopla donde quiere: tú oyes su voz, pero no sabes de dónde viene ni adónde va. Lo mismo sucede con todo el que ha nacido del Espíritu». « ¿Cómo es posible todo esto?», le volvió a preguntar Nicodemo. Jesús le respondió: « ¿Tú, que eres maestro en Israel, no sabes estas cosas? Te aseguro que nosotros hablamos de lo que sabemos y damos testimonio de lo que hemos visto, pero ustedes no aceptan nuestro testimonio.
Si no creen cuando les hablo de las cosas de la tierra, ¿cómo creerán cuando les hable de las cosas del cielo? Nadie ha subido al cielo, sino el que descendió del cielo, el Hijo del hombre que está en el cielo. De la misma manera que Moisés levantó en alto la serpiente en el desierto Vida eterna, también es necesario que el Hijo del hombre sea levantado en alto, para que todos los que creen en él tengan Vida Eterna.
Meditación:
Jesús le señala a Nicodemo un cambio radical en la manera de ser en el mundo, un cambio en cierta manera imposible pero que sin embargo Dios realiza; es el Espíritu quien lo hace y quien ilumina la comprensión. El tránsito entre una realidad y la otra, y la comprensión de ésta, la hace posible el Hijo del hombre levantado en alto, en la cruz, pero se entiende y asume desde la fe.
A Nicodemo, al igual que a nosotros, le cuesta entender. La comprensión de la cruz como gestación de un nuevo nacimiento que se produce en la resurrección es posible sólo desde la fe; es sabiduría divina que sólo el Espíritu puede revelar, y al Espíritu no lo controlamos, hay que plegarse a Él, en esto está nuestro desafío.
P. Plácido Álvarez.
Comments