top of page

Solemnidad de San Benito Abad.

  • Foto del escritor: Monjes Trapenses
    Monjes Trapenses
  • 10 jul 2020
  • 2 Min. de lectura


Libro de los Proverbios 2, 1-9.

Carta a los Colosenses 3, 12-17.

Evangelio según San Mateo 5, 1-12ª.

La lectura del Libro de los Proverbios nos recuerda el comienzo de la RSB con su énfasis en la escucha de la sabiduría y la prudencia como camino a una vida recta, orientada a toda obra buena y al conocimiento de Dios; en este camino hacia Dios tenemos el auxilio de San Benito que de tantas maneras es maestro de sabiduría.


Lo que puede ser esta vida sabia, prudente, fruto de la escucha de la Palabra de Dios, más aún fruto de la presencia de esa Palabra en nuestros corazones, nos lo dice la Carta a los Colosenses. En ese texto tan denso de significado podemos resaltar el amor, el mismo Apóstol lo hace: Sobre todo, revístanse del amor, que es el vínculo de la unidad consumada; ese amor del que fluye la unidad conlleva tantas actitudes que la misma Regla subraya: misericordia, bondad, humildad, dulzura, comprensión; todo esto desemboca en la


paz a la que hemos sido llamados en un solo cuerpo y que San Benito pone como meta citando el salmo: busca la paz y corre tras ella.

¿Hasta qué punto vivimos nosotros en estos términos? Es tan fácil falsearlos, quizás sin malas intenciones, pero sí dejándonos arrastrar por una defensa del propio ego que nos lleva a cerrarnos sobre nosotros mismos y a dejar de escuchar. Las tentaciones son muchas porque somos débiles, nosotros mismos y todos los que nos rodean.

En este punto el evangelio nos ilumina porque nos presenta la debilidad, la pequeñez, como el camino. En el fondo nos llama a no asustarnos de nuestra debilidad sino a asumirla sabiendo encontrar en ella el camino.

No son los poderosos ni los felices según los criterios de este mundo los que caminan hacia Dios, todo lo contrario. No son los saciados de sí mismos los caminan hacia Dios sino los que saben que en ellos hay un vacío que sólo Dios puede llenar, y que va a llenar. Son los que desde un corazón misericordioso y puro se acercan a los demás, y son misericordiosos porque saben que necesitan misericordia, y tienen un corazón puro porque no esperan que los demás les den lo que sólo Dios puede dar, y por lo tanto se alejan de la avaricia material, la emocional y la espiritual.

Todo esto está en el corazón del camino que Sa


n Benito desarrolla en su Regla. Todo esto está en el corazón de la ascesis monástica, de la renuncia que abre el propio ser a la verdad y lo lleva a reconocer su vulnerabilidad y la gracia de Dios. Cuando todo esto se acepta podemos vivir en la acción de gracias y cantar a Dios con gratitud haciendo todo en el nombre de Jesús. Entonces encontramos la verdadera felicidad incluso en m


edio de la tribulación, que es lo que el Señor nos en el evangelio; entonces gustaremos y veremos qué bueno es el Señor porque nos hemos acogido a él.

P. Plácido Álvarez.


Comments


Commenting has been turned off.

Monjes Trapenses Ntra. Sra. de los Andes - Venezuela

  • Negro Facebook Icono
  • Negro Twitter Icono
  • Icono social Instagram
bottom of page